Working Holiday Francia – Mi Reconversión Profesional al Vino

Para los más pragmáticos una visa working holiday es solo un año sabático, un paréntesis laboral/universitario o solo una oportunidad para ganar plata. Para los aventureros es salir de la zona de confort, encontrarse con uno mismo, agarrar roce social, y aprender habilidades como idiomas que te acompañaran para toda la vida.

Pero tanto para «pragmáticos» y «aventureros» la experiencia tiene fecha de expiración, y luego toca volver, sí más viajado, pero volver, con otra visión y más fuerzas.

¿Y luego qué?

Muchos deben hacerse esta pregunta, y sino, te la hará tu familia ¿Y luego qué? ¿Volver a lo mismo? Esa es una opción, la otra es seguir haciendo work and holidays, algo que me hubiese encantado hacer en su momento por lo demás. Pero para los que nos acercamos a los 30 a 35 años las oportunidades se agotan. La verdad es que hay otras opciones.

Mi Historia

A los 27 años me echaron de la pega, en una conocida empresa de retail en Santiago. Esto motivó a que partiera un viaje en Sudamérica renegando mi título de ingeniero comercial con ganas de aventura. Viví en Brasil y Ecuador, pero después de dos años quería encontrar una pasión donde poner toda mi energía.

Estaba ya casi en mis 30 y veía con terror volver a trabajar como ingeniero comercial a Chile. Toda la vuelta para llegar a donde mismo. Hasta que apareció la Work and Holiday Francia.

Preparación

En mi caso elegí Francia porque por puro instinto quería conocer el mundo del vino. Con 30 años por primera vez me hacia la pregunta «¿Y luego qué?». Me tomé en serio todo el proceso, y antes que la visa entrara en curso hice un voluntariado (lo cual recomiendo muchísimo) como obrero agrícola para empezar a aprender francés y tener algo que mostrar para luego encontrar un verdadero trabajo. Si, no gane plata, pero esta etapa fue la más dura, donde probé mi resiliencia y las verdaderas ganas de iniciar este camino. Viví por cerca de cinco meses muy aislado en Puechabon, cerca de Montpellier.

Work And Holiday Escuela

Gracias a los contactos del voluntariado, no costó encontrar trabajo. Inicié una vida nómade, de temporero en Francia. Me enamoré de la campiña francesa, de su gente, y el estilo de vida. Por primera vez sentía que hacía algo noble al estar en contacto con la materia. Luego de mi primera vendimia sentí que un año era demasiado poco, y decidí quedarme, pero eso es otra historia.

Por eso desmiento la temporalidad de una Work and Holiday, ya que, eligiendo el buen destino, alineado con una pasión una Work and Holiday puede cambiarte la vida, como me la cambio a mi.

Espero que este post te haya sido útil. Y si te interesó me sigas en mi blog de viaje y mi Instagram con más historias sobre Francia y rutas viajeras.

Nicolás Vergara
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